Elimina las expectativas externas.
Con el paso del tiempo y gracias a mi experiencia tanto personal como profesional, he descubierto que el principal motivo por el cual la gente sufre la mayoría del tiempo, se debe a las grandes expectativas que guardan acerca de muchas cosas que escapan de su control.
La superación personal implica crecer internamente y aprender a hacernos cargo de nuestra felicidad. Muchas personas dejan en manos de otros esta responsabilidad y es entonces cuando al guardar expectativas sobre otros pierden el control sobre su propia felicidad.
¿Pero a que me refiero con guardar expectativas?
Me refiero a esperar poco o mucho de asuntos externos. Por ejemplo:
- Esperar que una relación sea de cierta forma.
- Esperar que una persona cambie y sea diferente
- Esperar que un trabajo te haga feliz
- Esperar que tu familia te entienda, te apoye, o este de acuerdo en todo contigo.
- Esperar que llegue algo para ser feliz
- Esperar que tu pareja se comporte como tu consideras que sería el ideal.
- Esperar que las circunstancias cambien o permanezcan de tal o cual modo.
- Esperar que la gente nunca cambie y que a pesar de que pase el tiempo las cosas siempre se mantengan iguales.
- Esperar que alguien te corresponda de la misma manera que tú.
- Esperar, Esperar y esperar.
Un ser humano que lucha por su superación personal, esta listo para aprender sobre la marcha. Y esperar que otros hagan A o B no les permitirá sentirse satisfechos y felices y menos les permitirá superar esa sensación negativa que viven cada vez que esperan con sus expectativas sobre otros.
Cuando esperas poco o mucho de circunstancias externas, de las cuales no puedes tener el control absoluto porque depende de que otras personas hagan algo, actúen de cierta forma, o depende de que las cosas se mantengan igual o de que las circunstancias sean de una forma determinada, el riesgo de sufrir siempre es altísimo. Porque así como habrán momentos que las cosas sean tal como esperas, muchas otras veces sino es que la mayoría, las cosas no serán como esperas y entonces te sentirás defraudado, decepcionado, desilusionado, frustrado e incluso engañado. Y esto no quiere decir que sea culpa de aquello por lo cual esperabas mucho o poco, más bien significa que dejaste en manos del exterior tu capacidad de sentirte FELIZ aun a pesar de todo.
El antídoto para dejar de sufrir es muy simple, ELIMINA LAS EXPECTATIVAS EXTERNAS.
Recuerda que no puedes controlar el exterior y si esperas mucho de ello puedes salir herido, por lo tanto mi sugerencia es: ESPERA MUCHO DE TI, SIEMPRE TEN ALTAS EXPECTATIVAS D TI MISMO EN TODO LO QUE HAGAS Y HAZ TODO LO POSIBLE PARA CUBRIR TUS PROPIAS EXPECTATIVAS. No esperes mucho de otros y tampoco te preocupes por llenar las expectativas que otros tengan de ti porque también te sentirás colmado. La mayor felicidad es dar sin recibir, es sorprenderte maravillosamente cuando no esperas nada y eres feliz porque te haces cargo de tu felicidad.
Cuando no esperas nada de otros no corres el riesgo de desilusionarte porque simplemente entrenas el arte de permitir, de dejar fluir, de no querer controlar, y esto con la práctica se convierte en una sensación de paz continua.
Espero que te sea útil este artículo y que pongas en funcionamiento este antídoto cuanto antes.
Con todo mi amor,